domingo, 21 de enero de 2007

Huelga contra la especulación inmobiliaria

Ante el incremento desmesurado del precio de los pisos, que no se justifica de forma alguna, ya que el precio de los materiales ha bajado en los últimos 15 años un 50% en términos reales, no hay mejor calidad de los mismos y los pisos están hechos de la misma forma y en menos tiempo, habiendo más suelo urbanizable que nunca, es necesario actuar.

Las medidas hasta ahora han tenido escaso resultado y en los últimos años el precio de los pisos ha subido un 183%. De esto sólo se benefician los constructores, promotores y agencias inmobiliarias, que han proliferado por doquier, así como alcaldes y concejales, en especial de urbanismo, que se han convertido en sinónimo de corruptos. Los precios se multiplican en casi todas las zonas sin que haya la más mínima variación de las condiciones de los pisos, ni las autoridades puedan hacer nada, ya que este es un mercado libre.

Algunos hablan de abaratar el precio del suelo o incrementar la superficie urbanizable, pero se ha visto que esto no tiene ningún efecto, ni siquiera los bajos tipos de interés o cualquier medida que disminuya el coste para las familias, puesto que todas estas medidas serán aprovechadas por los especuladores para subir los precios y estrangular, aún más si cabe, al comprador.

Respecto de las manifestaciones están muy bien que los consumidores se quejen y se manifiesten pero como esos mismos manifestantes van después a endeudarse en una hipoteca al precio que sea, diciendo incluso que el alquiler es tirar el dinero, pues los constructores siguen vendiendo a precios desproporcionados, porque no dependen de lo bien que caigan sino de que sus pisos se vendan.

Yo proponga ante esta situación que los consumidores nos unamos contra esta plaga que esta devastando nuestro país, empobreciendo nuestros hogares y reduciendo nuestro poder adquisitivo, una huelga. Pero no manifestandonos, sino simplemente decidiendo no comprar pisos.

Si no compramos pisos, es decir si no hay demanda, los constructores y demás ralea asociada a este cada vez más oscuro mundo, tendrán que bajar los precios, y seguirán ganando mucho dinero, y la economía no entrará en crisis sino que estará más saneada y podremos disfrutar de la vida un poco más.

El alquiler no es una pérdida de dinero, puesto que para que lo sepan ustedes, a través de los intereses pagan dos veces el piso, una su valor real, y otra vez los intereses. Y dado que el precio del alquiler es menos de la mitad que la compra, pues ya me dirán ustedes.

En definitiva, todos unidos podemos. Stop a la especulación. Ni un piso más vendido a precios estratosféricos. La especulación se alimenta de la urgencia por comprar un piso. Parale los pies a los especuladores y no dejes que te engañen. ¡Estamos hartos de que nos roben! Pásalo.

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